La hidratación es tan importante para cualquier ser vivo, las plantas, animales y personas necesitan del agua para sobrevivir. Estar atentos a la hidratación de nuestras mascotas es una tarea que debemos chequear a diario.
Mantener hidratado a nuestro perro es importante para su salud. La manera de hidratarlo depende de muchos factores, tanto de su raza, las circunstancias ambientales como las condiciones físicas y salud de nuestra mascota.
¿Cómo saber cuánta agua debe beber mi perro?
Una regla para estimar la cantidad de agua que debe tomar tu perro es de acuerdo a su peso. Por cada kilogramo corresponde beber ½ litro de agua. A esto puedes incluir todos alimentos que incluyan agua.
Sin embargo, esta cantidad puede variar de acuerdo al nivel de actividad del perro y las condiciones ambientales en las que viva o la temporada del año.
Uno de los consejos para el cuidado de verano de nuestro perro es la hidratación constante. Los perros que viven o se enfrentan a climas cálidos, necesitan de 3 a 4 veces la cantidad normal de agua.
El consumo de agua de nuestro perro debe aumentar si es un perro muy activo o ha pasado un día de largo paseo.
¿Cómo saber si mi perro está deshidratado?
Nuestro perro puede deshidratarse si no mantenemos un adecuado suministro de agua, especialmente cuando las temperaturas suben o se encuentran enfermos. Hay que vigilar de cerca la ingesta de agua de nuestro amigo peludo y detectar si presenta alguno de estos signos que indiquen falta de hidratación.
1. Encías secas, pegajosas y pálidas
Revisa las encías de tu perro, si se encuentran pegajosas, secas y pálidas es muy probable que tu perro esté deshidratado. La boca de un perro hidratado debe mostrar una encía húmeda y rosada, y la saliva del perro debe ser delgada y traslúcida. Si la saliva del perro es gruesa y fibrosa, en definitiva se encuentra con falta de agua.
2. Somnolencia y letargo
Si su perro muestra menos energía en sus pasos y no muestra otros síntomas de alguna enfermedad, es posible que esté necesitando un poco de agua. Los músculos del perro, al igual que las personas, necesitan de agua para nutrirse y mantener las articulaciones lubricadas.
3. Pérdida de apetito
Si un perro no come, algo pasa. La pérdida de apetito puede ser una señal de algo más que falta de agua. Sin embargo, verificar que tenga agua fresca es indispensable para descartar cualquier gravedad.
Ofrece agua a tu perro antes de comer, si con esto continua sin apetito, consulta con su veterinario.
4. Aumento de jadeo y frecuencia cardíaca
El aumento del jadeo es un signo sin duda de falta de agua. Los perros regulan su temperatura al jadear. Si tu perro tiene jadeo constante es posible que tenga mucho calor y necesita hidratación extra.
Si tu perro comienza a tener un jadeo constante y que no cesa con la toma de agua, monitorea su frecuencia cardiaca. Si notas que la frecuencia aumenta, es posible que puede que esté a punto de tener un golpe de calor o esté ante otra situación que debe ser controlada por un veterinario.
¿Cómo prevenir que mi perro se deshidrate?
Mantener la hidratación de tu perro es una tarea sencilla si lo mantienes controlado. Solo debes seguir estas simples reglas para asegurarte de que tu peludo siempre esté tomando agua de forma correcta.
1. Mantén agua fresca y limpia
Un recipiente de agua que se mantenga limpio ayudará a evitar a crear bacterias o moho que luego son consumidos por nuestro perro.
Es importante que el recipiente de agua de tu perro se mantenga limpio y que el agua se cambie cada cierto tiempo. Verifica 3 o más veces que el bebedero de tu perro siempre tenga suficiente agua. No agregues agua nueva sobre el agua que resta en el recipiente. Reemplaza toda la cantidad del agua.
2. Lleva agua contigo
El paseo de nuestros perros es uno de los hábitos más saludables que podemos crear con nuestro perro. La hora de paseo significa muchas veces diversión, juego y mucha actividad, por ello debes asegurarte de siempre disponer de agua para que tu perro no pase sed después de ese ejercicio físico.
3. Comida hidratada para perros
Incluir comida húmeda o agua en el plato al servir la comida puede ser un truco para incluir más agua en la dieta de nuestro peludo. Mojar un poco el pienso puede ser una manera de que el perro continúe hidratado. Además, es una muy buena manera de servir la comida en verano.
Puedes también incluir sopas o comida caldosa, especial para perros, que al ser comida líquida suelen contener más agua y contribuir a la hidratación de la mascota.
¿Cómo saber si mi perro está bebiendo agua lo suficiente?
Como aún no podemos preguntarle a nuestro perro si está bebiendo agua como es debido y obtener una respuesta, debemos revisar ciertos comportamientos de nuestro perro para corroborar que el perro esté tomando la cantidad de agua que debe. Estas son algunas maneras de saber si tu perro está bebiendo suficiente agua.
1. Estima la cantidad de agua por el nivel del recipiente
Chequea la capacidad de agua del cuenco o bebedero y verifica cuántas veces debe cambiarse o acabarse en el día. Si el nivel del agua del recipiente no disminuye al ritmo que debería es porque tu perro no está tomando agua correctamente.
En la medida de lo posible, hay que estar atento a la cantidad de veces que el perro visita su recipiente. Quizá tu perro intente beber agua pero no le gusta su bebedero, el lugar donde está ubicado o el agua simplemente no está fresca.
2. Conviértete en un Pi-pilicía
Sí, es bueno estar atento a la cantidad de veces que el perro orina, especialmente cuando son cachorros.
Si tu peludo orina varias veces al día es una buena señal. Si el perro hace pipí de forma natural, sin olor y color normal indica que el perro está hidratado.
¿Qué agua puede beber mi perro?
Así como importa la cantidad de agua que bebe tu perro, es muy importante la calidad del agua que normalmente toma tu perro.
Evita que tu perro tome agua de fuentes o pozos donde el agua no tiene circulación. Al igual que estar atento de que no beba agua de charcos que están en calles o aceras que suelen estar contaminadas.
Si estás de paseo o aventura con tu perro y visitan lagos, estanques o lagunas reservadas, evita que tu perro tome agua de estos depósitos, ya que pueden contener parásitos peligrosos para tu perro.
Lo ideal es ofrecer a tu perro la misma agua que tu consumes. Asegúrate de que siempre dispongas de agua limpia y fresca para ofrecer a tu mascota.
Si mantienes todos estos consejos en cuenta puede ayudar a que tu perro mejore y mantenga su hidratación. Un perro hidratado no solo es sano, sino también luce de mejor aspecto y más ánimos. ¡Es más feliz!